Mural de Emiliano Zapata dibujado en el Ayuntamiento de Ayala, Morelos |
A LOS TRABAJADORES DEL CAMPO Y LA CIUDAD
A LOS SINDICATOS INDEPENDIENTES, CLASISTAS Y REVOLUCIONARIOS
A LAS COMUNIDADES Y LOS PUEBLOS EN RESISTENCIA
A LOS OBREROS AGRÍCOLAS EN PARO EN EL VALLE DE SAN QUINTÍN
EMILIANO
ZAPATA ¡VIVE EN LAS LUCHAS DE LOS TRABAJADORES DE LA CIUDAD Y EL CAMPO!
Cientos, quizá
miles de veces los trabajadores de la ciudad y el campo hemos gritado con todas
nuestras fuerzas durante las manifestaciones de protesta: ¡Zapata Vive… la
lucha sigue! ¡Zapata Vive y Vive… la lucha sigue y sigue!
De igual manera, cientos,
quizá miles de veces la gente que no comprende los motivos de nuestra lucha, ya
sea por falta de interés o información, o bien porqué ha tomado partido del
lado de la burguesía y sus instrumentos mediáticos, se pregunta ¿Qué tiene que
ver Zapata con la lucha actual de los trabajadores?
La respuesta, tanto
para seguir coreando con fuerza nuestras consignas, como para despejar las
dudas de quienes desconocen o se niegan a aceptar la realidad, es que el pensamiento
y el programa político del General Emiliano Zapata, en este Siglo XXI a 96 años
de su asesinato, continúan vigentes en muchos sentidos.
Emiliano Zapata no
era un “macho” con indumentaria de mariachi, al que le gustaban los corridos,
como lo pretenden presentar hoy los medios burgueses de comunicación. Tampoco
era un “caudillo” que simplemente defendía a los pobres para que “fueran
tratados mejor” por los caciques y gobernantes. El General Emiliano Zapata era
un revolucionario, de pensamientos y acciones anticapitalistas, que tenía como
propósito abolir la propiedad privada sobre los medios de producción y
socializarlos, al igual que la tierra; basando su modelo de lucha y
organización en el pensamiento anarquista y colectivista que a inicios del Siglo
XX, después de la revolución y la Comuna de París, junto al pensamiento
comunista, comenzaba a crecer y desbordarse en alzamientos armados en distintas
partes del mundo.
Hay que recordar los
postulados del Plan de San Luis y el Plan de Ayala, que en esencia declaraban
la guerra al porfiriato, pero también a los gobiernos burgueses y el modo de
producción y dominación capitalista. En ambos documentos de carácter histórico,
se expresaba la concepción política y social de las comunidades rurales e
indígenas, pero también de los obreros agrícolas y los peones de la época que
estaban hartos de la opresión y la explotación de que eran objeto.
Por ello, al releer
dichos textos y repasar la historia no oficial de Zapata y el zapatismo,
encontramos que nuestras luchas, las luchas actuales de los trabajadores de la
ciudad y el campo, tiene bastante en común con las luchas que el General
Emiliano Zapata y el Ejército Libertador del Sur emprendieron contra la
tiranía.
¿No son acaso
luchas hermanas las libradas por Zapata en los albores del Siglo XX contra el
porfiriato y la dominación extranjera, con las luchas actuales de los pueblos
originarios de Oaxaca contra los mega proyectos eólicos, mineros, hidráulicos,
etc.?
¿No tienen validez
histórica la lucha por el reparto agrario que encabezó el General a comienzos
del Siglo XX con la lucha permanente de los ejidos y las comunidades indígenas
en defensa de su tierra y territorio?
¿No son acaso
idénticas las demandas y las batallas de los obreros agrícolas zapatistas en
los inicios del Siglo XX con las de los obreros agrícolas del Valle de San
Quintín, en Baja California, que siguen en paro general de labores en defensa
de sus derechos?
¿Acaso son
distintas las causas que motivaron la lucha de los trabajadores y la formación
de los primeros sindicatos en México, con las causas y las luchas de los
trabajadores y nuestros sindicatos independientes?
El pensamiento y la
obra del General Emiliano Zapata siguen vigentes y en nuestra INTERSINDICAL DE
OAXACA los retomamos en cada acción, en cada texto, en cada lucha que desarrollamos.
Por eso nuestras
consignas, más que conmemorativas, son consignas de combate contra el capital.
Por ello, en la INTERSINDICAL seguimos llamando a otras fuerzas, a otros esfuerzos, a otras luchas, a otros compañeros de combate a unir nuestros pasos, a caminar juntos por el sendero de Zapata y Villa, por el sendero de Rubén Jaramillo, de Arturo Gámiz, de Genaro Vásquez, de Lucio Cabañas, de Florencio Medrano, de Gregorio Alfonso Alvarado López, de Lauro Juárez, de Alfredo Errestre, de Gustavo Salgado y de todos aquellos hombres y mujeres que han ofrendado sus vidas por el cambio revolucionario en nuestro país.
Seguimos llamando a construir el Frente Único del Trabajo Contra el Capital y el Frente Único de Todo el Pueblo, para hacer de este 2015 el año de la Huelga Política General y el derrocamiento del régimen.
¡ZAPATA
VIVE… LA LUCHA SIGUE! ¡ZAPATA VIVE Y VIVE… LA LUCHA SIGUE Y SIGUE!
¡SOLIDARIDAD CON LAS COMUNIDADES Y LOS PUEBLOS EN RESISTENCIA!
¡APOYO TOTAL AL PARO DE LOS OBREROS AGRÍCOLAS DEL VALLE DE SAN QUINTÍN!
¡LA EMANCIPACIÓN DE LOS TRABAJADORES DEBE SER OBRA DE LOS TRABAJADORES MISMOS!
COORDINADORA
INTERNSINDICAL DE OAXACA
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